Poeta Callejero cierra el primer día MBF en Salinas

Salinas, Baní. El Poeta Callejero es un fenómeno. Le acompañan, además de su talento, esa dosis de histerismo natural en los artistas de verdad, y la leyenda urbana de convertirse de pordiosero en rey. Lo explota con entusiasmo. Y la gente, alelada, casi llora, y lo aplauden a rabiar, como la noche del sábado en Salinas, cuando cerró, casi a las 10 el Mega Beach Fest, previsto para cerrar a las 7.

Salinas queda muy retirado de Baní, y como si fuera poco, llovió en la capital, Baní y San Cristóbal: resultado, un público que el sábado casi llega a las 2,000 personas, en un espacio bastante ambicioso. Pero eso sí, calidad, buen despliegue de luces y efectos, y sobre todo, la evidencia de un movimiento que cada vez toma más fuerza y necesita de que talentos como el de Roy Tavaré -andaba por allí- se "tiren" de lleno a darle color, personalidad y originalidad a los bites que los raperos, hiphoperos y dembowceros deben llenar con sus letras.

El público -criollos y extranjeros-, coreó letras y ritmos de La Materialista, El Lápiz, Don Miguelo, Melymel (dio muestras de mucha profesionalidad al fallar la Mac), Mozart La Para (uno de los más aplaudidos), Chambo Pana Black (vestido de Iyabbó, fue el encargado de abrir y fue bastante coreado, a pesar de desencuentros con lo que pedía a su Dj); El Batallón (una de las propuestas más interesantes y con mayores perspectivas), Villano Sam (muy coreado), Jay y el Musicólogo, Mister Manyao; y El Alfa.

Arena caliente, y esas Bohemias frías. Por allí las despampanantes niñas de 911. Playa transparente. Y la música urbana, reinando.